Ya me compadeces por estos versos que gritan como un accidentado,
Pero lamento informante que no he terminado porque aún no estas a mi lado.
Anoche te vi en aquel sucio bar,
Usando ese tonto peinado que tanto me gusta al andar,
Y como tantas veces quise decirte que me estoy cansando de tus juegos mentales,
A los que les falta algún objeto o modales.
Pero al parecer eres incapaz de tomar decisiones correctas o tener buenas ideas concretas.
Ahora tal vez sea tiempo de rendirme y dejar que la vida siga su curso firme,
O que el camión simplemente me atropelle de manera abrupta
Como tus ojos en la penumbra cuando me miran de esa manera tan corrupta.