Así de fácil es confundirse.
Así de fácil es perder la noción del tiempo.
Así de fácil es hundirse en un mundo lleno de psicodelias y emociones confusas.
Así de fácil es caer en la ignorancia y en la incoherencia.
Es como tomar una bocada de oxigeno a cada segundo, así de fácil.
Como si lo hubieras practicado miles de veces para al fin hacerlo frente a cientos de espectadores.
Momentos llenos de calma y relajación, pero con un bache puedes tropezar...
Y solo sonreír ocultando que acabas de caer.
Así de fácil es caer, y estar mal, el problema es levantarse de nuevo.