Lo que normalmente sucede es que llega alguien a tu vida y en un estornudo se va, dejando vacíos imposibles de llenar.
En este momento descubrí que me perdí a mi misma, que me fui desvaneciendo frente a las situaciones que transcurrían por mi vida, olvidándome de lo que en realidad soy.
El amor te hace débil.
Y recordé que esto era a lo que tanto temía. Estoy en la situación a la cual temí todo el tiempo y no es distinta de como me la imagine; lo malo es que olvidas. Olvidas todo lo que planificaste, olvidas tu contra-ataque, olvidas lo que en realidad eres o lo que opinas sobre esta situación. Pero lo único que me tranquiliza es que el tiempo si lo cura todo. Y en un futuro no muy lejano, recordare estos instantes, reiré de mi misma y sabré que fuiste uno más que eche a la lista de los "que nunca funciono".
Al fin y al cabo solo fue un idiota que lleno mi cabeza con palabras sin sentido.