Brenda ya había abierto las cortinas y las ventanas también, había atrincherado su habitación y se aposto en la ventana principal. Brenda a sus 16 tenía excelente puntería, y reía mientras disparaba. A este punto de la historia ya había herido a ocho niños y un oficial, ademas de haber asesinado al director de la escuela Burton Wragg, y a alguno que otro guardia. Seis horas, seis horas llenas de disparos y risas.
Al final, la diversión termino y los policías tenían a Brenda con las esposas ya puestas.
Ahora, dime ¿Por qué Brenda?
Y Brenda lo mira con sus lindos ojos y su seño aún fruncido, abre sus labios y dice "No me gustan los lunes, esto me animo el día. No tengo ninguna razón más, sólo fue por divertirme. Vi a los niños como patos que andaban por una charca y un rebaño de vacas rodeándolos" En ese momento sonríe y acaba la frase con: "Blancos fáciles".
Brenda es condenada a cadena perpetua con la posibilidad de salir a los 30 años en una institución para mujeres en California.
Historia inspirada en la canción "I don't like mondays" o mejor dicho, en lo que paso ese Lunes 29 de Enero de 1962.