sábado

Te extraño.

Extraño el sabor de tu lengua cuando rozaba la mía.
Extraño tus abrazos y tu olor. 
Extraño que me mires a los ojos y me digas alguna tontada que me haga reír. 
Extraño sentir el calor en la mañana, extraño esa seguridad de siempre tenerte a mi lado. 
Extraño salir agarrada de tu mano sintiéndome como la mujer mas afortunada del planeta. 
Extraño tus llamadas extrañas; nuestras conversaciones interesantes, duraderas y a veces incoherentes. 
Extraño tus chistes malos que al fin y al cabo siempre me hacían reír. 
Extraño tus labios delgados que me hacían estremecer a cada beso. 
Extraño tu voz, tu cabello, y tu mirada.
Extraño tus besos suaves y callados, tiernos pero apasionantes...
Extraño todo lo que vivía junto a ti...
Ahora... 
¡Suena teléfono! Y ojala que al levantar la bocina este presente tu voz y tu aliento...
























                               Te esperare aquí, como una roca...