lunes

Luna al revés.

Annie anduvo caminando en la noche sin rumbo alguno y con algunos tragos en su cabeza busco la luna que parecía estar al revés, tan clara y blanca como siempre.
"Las personas siempre terminan llendose" pensó Annie, y se detuvo para buscar algún lugar abierto y poder disfrutar de el pequeño calor que brinda algún bar de mala muerte.
"Y más las que son más significativas para ti" y continuo repitiendo cosas en su cabeza.
"Siempre tiene que pasar algo y tienes por cosas del "destino" alejarte de ellas, aunque tu mente, tu corazón, y tu cuerpo pidan a gritos unos minutos más, no es posible, porque la vida te enseña que no hay que apegarse a nada, que nada es indispensable en la vida, y que ademas, esta siempre te va a poner muros, para que pienses o intentes detenerte, pero la vida sigue, y nosotros, somos los que la manejamos, y los que somos indispensables".

-Nadie ni nada es necesario para nosotros, solo el hecho de tener fuerza y valor para seguir solo en este camino que termina en un parpadear- Y esto ultimo lo pensó en "voz alta"; un hombre la observo y Annie poso sus ojos sobre el, allí conoció a lo que nunca dejaría, lo que sera indispensable para ella, su necesidad, lo que hará que su vida se detenga por un segundo. O más.